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CANAS DE VOYEUR, POR NICOLE SUS
EDITORIAL YAUGURU
TIRAJE LIMITADO DE 300 EJEMPLARES
MONTEVIDEO - URUGUAY - 2011
56 PAGINAS
Si tuviera que describirla en una palabra, diría que Nicole Sus es “pasional”. En los más de diez años que la conozco, ha llorado amores más que cualquiera. A veces me gustaría ser más como ella: cuando ama se entrega toda y, cuando sufre, el dolor le inunda el cuerpo y el alma. Ningún sentimiento le es ajeno, ningún paisaje, ninguna palabra, ninguna canción. Quizá por eso el primer libro que escribió, Canas de voyeur, está cargado de erotismo y sensualidad desde la mismísima tapa.
Pensándolo bien, el libro entero es puro erotismo. Poesía erótica, de esa que frunce el ceño de los hombres tradicionales y deja a las mujeres “de bien” de boca abierta hasta el piso. Y Nicole tenía sólo 23 años cuando lo publicó, y entonces se animó a leerlo frente a todo el que quisiera escucharla. Digo esto porque, cuatro años después, la timidez sigue envolviéndola toda y, mientras charlamos, mecha respuestas con chistes como quien quiere hablar y no y sí y no.
Admira a Marosa Di Giorgio, así que lo incluyó en sus páginas. Y admite que su “musa” se llama Luis, pero que toda la relación fue platónica. “En realidad, el libro se iba a llamar Luis”, dijo entre risas. Al final se llamó Canas de voyeur: “Era un verso que pertenecía a un poema que estaba en el libro”, contó. Quien lo eligió fue su mentor, René Fuentes Gómez, y le explicó que hay poemas que sirven para publicar y poemas que contienen el título de un libro. También formaron parte de la obra Rafael Courtoisie y todos sus compañeros del taller literario que estaba haciendo entre los años 2009 y 2010. “Publicar el libro fue como un parto. Tuve que admitir que ya no era mío sino del que lo tuviera, y del que lo leyera y quisiera decir algo sobre lo que el libro dice, interpretarlo”. Es que, a pesar de que todas las expresiones artísticas son personales, la escritura erótica suele transportar los momentos más íntimos de una persona a la mente de otra que imagina, sueña, fantasea y participa.

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