en 10 cuotas de sin interés

Envío a todo el país

Conoce los tiempos y las formas de envío.

¡Última disponible!

LIBRERIABILDUNGLIBROS

+100 Seguidores

+10mil Productos

MercadoLíder

¡Uno de los mejores del sitio!

+1000

Ventas concretadas

Brinda buena atención

Entrega sus productos a tiempo

Medios de pago

Tarjetas de crédito

¡Cuotas sin interés con bancos seleccionados!

Mastercard
Visa
American Express
Oca

Tarjetas de débito

Visa Débito
Mastercard Débito

Efectivo

Abitab
Redpagos

Características del producto

Características principales

Autor
Nick Hornby.
Idioma
Español
Editorial del libro
Anagrama
Color de la portada
Celeste
Tapa del libro
Blanda
Volumen del libro
4
Tamaño de la letra
Estándar
Con índice
Año de publicación
2019

Otros

Cantidad de páginas
360
Altura
21 cm
Ancho
14 cm
Con páginas para colorear
No
Con realidad aumentada
No
Traductores
MIGUEL MARTÍNEZ LAGE
Género del libro
Narrativa
Tipo de narración
Novela
Edad mínima recomendada
1 años

Descripción

Era 1995 y yo vivía en Cricklewood, un siniestro barrio londinense donde, una década atrás, Dennis Nilsen había matado a quince personas y arrojado sus restos por el retrete. No era muy feliz. Cultivaba una anorexia a media jornada, trabajaba en McDonald’s, vivía con un expresidiario y varios ratones, había roto con una novia (horrible) y con la subcultura mod. Tenía veinticuatro años y creía que mis sueños se habían ido por el váter, como cachos de víctimas de Nilsen. Incluso había dejado de leer, tras decidir, con Philip Larkin, que los libros eran «un montón de mierda» y que valía más «darle al frasco». Y escuchar rock’n’roll.

Entonces recibí un paquete de mi madre. Contenía un ejemplar de Alta fidelidad, de Nick Hornby, y una carta: «Este libro eres tú.» Y lo era. De acuerdo, yo no llevaba «jerséis horribles», como Rob, el propietario de la tienda de discos que protagoniza la novela, pero el libro la clavaba en lo restante: melancolía (tic), obsesión por hacer listas (tic), casetes recopilatorios con fines amatorios (tic), halo loser (tic), nerdez irreparable (tic), odio a Sting (requetetic). Alta fidelidad me recordó que algunas novelas sí hablaban de mi (nuestra) circunstancia. Me devolvió la ilusión y recalentó mi entusiasmo. Me hizo volver a amar los libros (aunque nunca dejé de darle al frasco). Y me recordó (supertic) que la música pop era la octava maravilla del planeta. Miradme: 1996, cuarto enmoquetado, engullendo Barons de lata y escribiendo paridas mientras suena el Ten Spot de Shudder to Think y el Demmamussabebonk de Snuff. Tras varios años de rencor homicida, asoma en mi cara una cauta sonrisa.

Cheers, Nick.

Kiko Amat

Ilustración de la cubierta: Clara León

Preguntas y respuestas

¿Qué quieres saber?

Nadie ha hecho preguntas todavía. ¡Haz la primera!