Calificación 4.3 de 5. 4 opiniones.
4 calificaciones
en 10 cuotas de sin interés
+100 Seguidores
+10mil Productos
MercadoLíder
¡Uno de los mejores del sitio!
+1000
Ventas concretadas
Brinda buena atención
Entrega sus productos a tiempo
Autor | CARLOS LISCANO |
---|---|
Idioma | Español |
Editorial del libro | Fin De Siglo |
Color de la portada | Rosa |
Tapa del libro | Blanda |
Tamaño de la letra | Estándar |
Con índice | Sí |
Año de publicación | 2022 |
Cantidad de páginas | 160 |
---|---|
Altura | 22 cm |
Ancho | 16,3 cm |
Con páginas para colorear | No |
Con realidad aumentada | No |
Con concordancia | No |
Género del libro | Política. |
Subgéneros del libro | Política. |
Tipo de narración | Política. |
Con cierre | No |
Edad mínima recomendada | 0 años |
Escrito en imprenta mayúscula | No |
«Hablo de lo que me pasó a mí, que también fui creyente, fervoroso defensor de la Revolución cubana, admirador del Che. Muchos amigos míos acabaron en la cárcel por defender esas ideas. Algunos murieron. Casi todos éramos muy jóvenes».
Este libro es la crónica de un desencanto largamente procesado y, también, una severa acusación a parte de la intelectualidad occidental y gran parte de la izquierda, crítica (a veces) en la intimidad pero obsecuente en lo público.
Pasados más de sesenta años de aquella revolución que prometía independencia, libertad y justicia social en la isla que era burdel y casino de Estados Unidos, ¿qué queda? En el haber gente alfabetizada, una salud pública relativamente aceptable, comida racionada. En el debe: una inmensa mayoría de la población empobrecida, la casta comunista-militar-gubernamental gozando privilegios, millones de exiliados, libertades hechas cenizas y represión, más represión.
En palabras del autor: «La izquierda democrática latinoamericana no solucionará los problemas de Cuba. Eso deben hacerlo los cubanos. Sí se puede denunciar a la burocracia que gobierna la isla, exigirle que respete los derechos humanos, que abandone sus delirios de martirologio y acepte los cambios que su inviable economía necesita. Que entienda que la Guerra Fría acabó hace muchos años. Que permita que su población participe en las decisiones de gobierno, en la economía del país, en el desarrollo cultural y científico. Hay que denunciar los atropellos y la represión contra los ciudadanos cubanos cada vez que se tenga noticia de que eso ocurre, igual que se hace con las violaciones a los derechos humanos en cualquier lugar del mundo.
El pensamiento progresista latinoamericano debe abandonar el silencio vergonzoso, rehabilitar su tradición libertaria, igualitaria, en defensa de los cubanos sometidos por el partido único».
Carlos Liscano
Dramaturgo, poeta, periodista y narrador. Ha publicado más de cuarenta títulos, entre ellos: La mansión del tirano (1992), El camino a Ítaca (1994), El furgón de los locos (2001), El escritor y el otro (2007), Oficio de ventriloquia. Relatos 1981-2011 (vol. 1 y 2) (2011), Escritor indolente (2014), Vida del cuervo blanco (2015) y Los orígenes (2019).
Fue director de la Biblioteca Nacional entre 2010 y 2015. Obtuvo el Primer Premio Nacional de Literatura del Ministerio de Educación y Cultura en las categorías teatro, narrativa y poesía. Fue dos veces galardonado con el Bartolomé Hidalgo, que otorga la Cámara Uruguaya del Libro. Recibió la orden de Caballero de las Artes y las Letras por el gobierno de Francia. Sus obras han sido traducidas a inglés, francés, portugués, catalán, italiano, árabe y sueco.
Opiniones destacadas
2 comentariosCalificación 5 de 5
Lo tengo que leerlo hoy de noche.
Calificación 3 de 5
Crónica de un desencanto anunciado. Otro que pasó su vida intentando desmentir las verdades que se sabían y ellos ocultaban. Ahora relata como en realidad él se iba dando cuenta, les avisaba a los demás y los demás no querían creerle. Intenta lavarse las manos criticando a diestra y siniestra pero sin hacer una real autocrítica. Muy útil para confirmar lo que ya se sabía, por venir de una figura de la izquierda. No creían en lo que se decia de la urss, hasta que se cayó. No creian en lo que se decía de cuba hasta que ahora es un desastre inocultable. Y pretenden darnos clases de democracia.